El día que el papel se haga pantalla
Mucho se ha hablado de la convergencia de los medios. Que vamos a escuchar radio en el televisor o vamos a ver televisión en el computador. Pero aunque tu computador no tiene antena de TV y el televisor no sintoniza FM, hoy no cabe duda que todo se juntará en un mismo lugar. Ese lugar será una pantalla. Tendrá diferentes formas, dimensiones o texturas, dependiendo del uso requerido, pero será una pantalla. Un soporte para un mismo medio que conducirá todo el contenido. Ya hemos hablado que todo el contenido será digital y que el único medio que transporte todo será internet. Ahora sabemos que el despliegue de todo contenido, siempre será en una pantalla.
Primero, partamos por olvidar lo que consideramos tradicionalmente como una pantalla. Olvida ese foco de luz, muchas veces incomodo de observar por largos periodos de tiempo. Ese enemigo del texto.
Ahora, piensa en el papel como una pantalla. Estamos acostumbrados a pensar en el papel como una hoja elaborada de celulosa proveniente de un árbol. Sin embargo hay un gran grupo de empresas, que van desde Fujitsu a Philips, pasando por Siemens y Xerox, que llevan más de 10 años investigando y desarrollando pantallas tan flexibles, legibles y prácticas como el papel. Algunas están más cerca de su objetivo que otras, pero todas avanzan a un ritmo acelerado hacia su meta:
Una pantalla que puedas doblar y meter en tu bolsillo. Que puedas leer a pleno sol como el mejor libro — y con la misma textura. Que no consuma energía mientras lo estás leyendo o llevas bajo el brazo. Pero que pueda reproducir videos con la misma facilidad que despliega texto.
Pero también tendremos pantallas como las que acostumbramos hoy. Una película siempre se disfrutará mejor sobre una gran pantalla que podamos observar a distancia sentados cómodamente, que sobre un papel digital en nuestras manos. Una página web siempre será más fácil de usar en una pantalla de tamaño intermedio con teclado y mouse, que sentado a distancia desde un sofá. Para cada uso o preferencia personal, habrá una pantalla que mejor se adapte. Incluso tenemos necesidad de dispositivos especiales, que podamos llevar con nosotros todo el tiempo para comunicarnos desde cualquier punto, que a su vez requiere su propio formato de pantalla, como el celular.
Pero sea en la pantalla del televisor, la pantalla del computador, la pantalla del celular o el papel como pantalla, el contenido digital entregado por internet podrá ser consumido en cualquiera de ellos. Podrás leer el periódico del domingo en tu televisor, aunque muchos preferirán hacerlo en papel digital mientras toman desayuno en la terraza.
Muchas de las pantallas están listas para recibir el contenido, muchos de los usuarios ya están consumiendo cada vez más contenido sólo por pantallas, pero son muchos de los generadores tradicionales de ese mismo contenido los que no están listos para esta revolución.
Los medios tradicionales — los periódicos, revistas, radios, estudios de cine y televisión — experimentan tímidamente con internet, pero siguen distraídos por sus canales tradicionales de distribución. Yo ya no leo diarios, no escucho radio y no veo televisión — al menos no impresos, ni por FM, ni por TV cable.
Las estadísticas muestran que cada vez la gente compra menos diarios o ve menos televisión. Pero desafío a usted, querida lectora o querido lector, a que intente sintonizar un partido de fútbol en vivo por internet, sin usar servicios ilegales. Es prácticamente imposible. Los medios tradicionales siguen avivando el fuego donde los usuarios han estado históricamente, donde aún están hoy, pero no donde estarán mañana. Sólo un puñado está preparado para el futuro de múltiples pantallas. La mayoría mantiene el contenido exclusivamente en una “pantalla” sin aprovechar de llegar a todas.
La televisión la vas a ver en papel, en un computador o en el televisor. El diario lo vas a leer en papel, en un computador o en el televisor. Internet lo vas a navegar en papel, en un computador o en el televisor. Da lo mismo el contenido, da lo mismo el medio, da lo mismo el soporte. Siempre será digital, por internet, en una pantalla.